martes, 22 de julio de 2014

Manifiesto Educación 3000


1. Considerando
  1. Los rápidos y masivos cambios en todos los niños y niñas de hoy, cambios que observamos en el ámbito físico, fisiológico, emocional, cognitivo, conductual, ético y espiritual.
  2. La necesidad de adecuar la educación actual a las capacidades de los niños, niñas y jóvenes de hoy, tanto en su manera de aprender como de ser, aprehender e interiorizar el mundo.
  3. La necesidad de madres, padres y docentes de vivir la educación en bienestar, paz y armonía y de mejorar la calidad de vida en el hogar, escuela y sociedad.
  4. Las aspiraciones globales actuales hacia la co-construcción de una nueva humanidad más humanitaria, solidaria y multicultural.
  5. Los nuevos paradigmas que inciden en todos los ámbitos del desarrollo humano.

2. Manifestamos
2.1 Que queremos, todos juntos, impulsar una nueva educación que responda a los parámetros expuestos anteriormente.
2.2 Que deseamos colaborar activamente en una educación que esté basada en los niños, niñas y jóvenes, y en sus necesidades actuales.
2.3 Que pretendemos co-construir, ahora y cada uno desde donde esté, un entorno educativo apropiado, así como las herramientas y propósitos para una nueva educación.
2.4 Que nos comprometemos a atender los aspectos afectivo y emocional de los niños, niñas, jóvenes y de uno mismo como base fundamental de todo proceso de crecimiento.
2.5 Que vamos a difundir lo anteriormente expuesto y crear una mayor conciencia global en el planeta.

3. Invitamos
3.1 A los Estados, Naciones,  Ministerios de Educación y Organismos Internacionales comprometidos con la infancia, la juventud y el desarrollo humano, a las ONG's, Instituciones, Asociaciones, Colectivos y a toda la población mundial
3.1.1  A sumarse y atender armoniosamente, en sus ámbitos de influencia, a los cambios que requiere una nueva educación, apoyando así el futuro de sus respectivos países y del planeta.
3.1.2  A considerar y priorizar en todas las áreas (educativa, sanitaria, social, deportiva, tecnológica, ambiental...) a los niños, niñas y jóvenes de hoy y a los que están por venir.
3.1.3  A fomentar e instrumentar los cuatro pilares de la educación expuestos en el informe a la UNESCO por la Comisión Internacional sobre la Educación para el Siglo XXI: Aprender a conocer, aprender a hacer, aprender a vivir y aprender a ser.
3.1.4 A apoyar investigaciones multidisciplinarias y desarrollar herramientas alternativas y complementarias para el desarrollo integral del ser.
3.1.5 A reconocer que el derecho a la educación comienza en el periodo prenatal y continúa durante todo el ciclo vital.
3.1.6 A implantar un marco legal flexible que reconozca a las familias y educadores la libertad de crear escuelas-centros experimentales y llevar a cabo otras iniciativas educativas alternativas, ofreciéndoles el apoyo necesario.

3.2.  A los productores y medios de comunicación
3.2.1 A comunicar y transmitir las nuevas características y necesidades de los niños y niñas de hoy, así como las herramientas educativas vinculadas a éstas.
3.2.2 A producir, promover y difundir programas, productos y materiales que apoyen todo lo  manifestado anteriormente y generen mayor conciencia.

4. Alentamos a que el máximo número de personas, asociaciones, instituciones y gobiernos firme este Manifiesto y lo apoye activamente
Para nosotros y nosotras mismos
      Para los niños y niñas
            Para la nueva humanidad
                  Para el planeta                                                                                                                 
Manifiesto redactado por ciudadanos del mundo, todos unidos y unidas, durante el Encuentro Internacional que tuvo lugar en Argentina el 3 de agosto de 2008, organizado por el Enlace Mundial para una Nueva Educación, Adhyayana22-educándonos con conciencia y Asiri (a la fecha inicialmente firmado por representantes de Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, España, Catalunya, Francia, México y Perú), y lanzado a nivel mundial simultáneamente el 8 de agosto de 2008.
Para firmar digitalmente este manifiesto ingresar a firmar electrónicamente por la web www.pedagooogia3000.info  

sábado, 19 de julio de 2014

Las capacidades espirituales


En el estado actual de la sociedad los niños enfrentan un destino cruel. Millones y millones en un país tras otro están socialmente desplazados. Los niños se encuentran alienados por sus padres y otros adultos ya sea que vivan en condiciones de riqueza o de pobreza. Dicha alienación tiene su raíz en el egoísmo nacido del materialismo que existe en el centro mismo de la irreligiosidad que se ha adueñado del corazón de la gente en todas partes. La marginación social de los niños de nuestro tiempo es signo inequívoco de una sociedad declinante; dicha condición, sin embargo, no está limitada a raza, clase, nación o condición económica alguna, las atraviesa a todas. Nuestros corazones se apenan al ver que en tantas partes del mundo los niños son usados como soldados, explotados como trabajadores, vendidos en virtual esclavitud, forzados a la prostitución, hechos objeto de la pornografía, abandonados por padres entregados a sus propios deseos, y convertidos en víctimas de otras maneras demasiado numerosas de mencionar. Muchos de estos horrores son infligidos a los hijos por los propios padres. El daño espiritual y psicológico es inestimable. (1)
Nuestros esfuerzos personales se centran en el logro de anhelos materiales, afectivos, espirituales. Progreso económico, estudios, salud, esparcimiento. En la mayoría de los casos este espectro de anhelos se reducen al ámbito de la familia propia. Pero ¿será posible nuestro propio bienestar mientras millones y millones de nuestros congéneres están pasando por las peores miserias del mundo, miserias provocadas por el propio ser humano?
Hacemos planes y proyectos, cuando podemos ahorramos dinero, compramos, vendemos, mejoramos nuestras condiciones de vida. Entre estas acciones incluimos la educación de nuestros hijos, entendiéndola como una "inversión", pensando que así se establecen las bases de potencialidades para su futuro. Mas ¿qué tipo de potencialidades? ¿Laborales, económicas, sociales, culturales? Es que el concepto de "inversión" implica expectativa de retorno, mientras que la verdadera educación podría tener implicancias que van más allá de esto.
Se requiere, por un lado extender entonces nuestros corazones a los lejanos horizontes sin fin y anhelar el bienestar de todos los niños del mundo, pensando en ellos como si fueran los nuestros. Anhelar la paz, la fraternidad universal, la equidad y la igualdad de derechos para todos. Ese es el primer paso y el punto de inflexión en el que se comienza a construir el verdadero beneficio personal, el que sólo se da dentro del beneficio del conjunto.
Proyectemos y anhelemos una transformación, un mundo nuevo para todos nuestros hijos. Los cimientos y pilares de esta transformación son la verdadera educación, que comienza desde el hogar.
El primer paso es el amor y afectividad de los padres hacia los propios hijos, el siguiente es extender este amor más allá de las fronteras de nuestra célula familiar, la visión de pertenencia a la gran familia humana, la conciencia planetaria y de unidad.

Trabajemos juntos en la construcción de un mundo nuevo para nuestros hijos. Los niños que están siendo azotados en forma inhumana bajo las líneas de fuego de la guerra también son nuestros hijos, los que se mueren de hambre o mueren de enfermedades prevenibles y curables, los que a nuestro lado están siendo sometidos a los peores estragos de una sociedad individualista y materialista, y están siendo fagocitados por el "sistema", también son nuestros hijos. Son los hijos de la humanidad, son el futuro, los que construirán una nueva civilización planetaria, una y diversa, siempre que reciban contención amorosa y una educación inspirada en elevados valores.
Una educación que recoja los valores y las virtudes que han sido pregonadas por las religiones universales, aplicando estos ingredientes maravillosos para el cultivo de estas tiernas plantas. Desde nuestra casa, desde nuestros trabajos, desde nuestros proyectos.
Adoptemos millones de hijos espirituales, que en definitiva son nuestra riqueza inapreciable y nuestra esperanza. Ellos construirán un nuevo mundo justo, armónico y equitativo para TODOS.
(1) Fragmento de un mensaje de la Casa Universal de Justicia

sábado, 12 de julio de 2014


Los Padres y el Desarrollo Infantil


Por Giselle Silva
Extraído de la Revista "Espacio para la Infancia" de la Fundación Bernard van Leer
Enero 2001 Número 16
El reto que supone el apoyo a programas de desarrollo infantil ha despertado el interés y la necesidad de reflexionar acerca de la importancia del papel que juegan los padres en el desarrollo de sus hijos, y los beneficios que brinda una buena interrelación entre éstos. Es creciente la conciencia de la necesidad de asumir enfoques holísticos en dichos programas, que incorporen - como parte de sus estrategias - la participación de los padres, no sólo como agentes que procuren la supervivencia biológica del niño, sino sobre todo como aquellas personas responsables de su cuidado, soporte, estimulación y desarrollo integral. La necesidad de profundizar en este tema nos lleva a plantear interrogantes esenciales que presentaremos a continuación.
¿Porqué los niños necesitan a sus padres?
Nacer con vida, recibir alimento, estar limpio y protegido del frío no garantiza el acceso a la humanización. De hecho, una máquina bien programada podría cumplir las funciones de nutrir, abrigar y limpiar con puntualidad y exactitud. Por lo tanto, la necesidad de los padres tiene que ver con mucho más que brindar satisfacción a las necesidades básicas de hambre, regulación de la temperatura o higiene. Los niños necesitan de sus padres para convertirse en humanos, en el sentido más general del término. Esto sólo es posible a partir del establecimiento de un vínculo entre dos: un adulto disponible y dispuesto a adoptar a su hijo; y un niño que requiere de este adulto para ser incorporado en su especie y alcanzar el estadio donde pueda valerse por sí mismo. La esencia de la parentalidad (1) radica en este lazo, y es lo que permitirá al infante el acceso a desarrollarse como persona, en el más pleno sentido del término.
Muchos estudios sobre desarrollo infantil han podido constatar los dañinos efectos de la carencia, fragilidad o ruptura de un vínculo saludable y sólido entre el infante y su figura parental. Los estudios de resiliencia muestran también que uno de los factores protectores principales frente a la adversidad es la disponibilidad de un vínculo humano incondicional que, por lo general, lo constituyen los padres o aquella persona que los represente.

Ser padres y la necesidad de apoyo
Es padre o madre quien parentaliza a un niño y asume esta función desde una posición determinada. Esta función guarda relación con dos aspectos: con la provisión de cuidados que aseguren la supervivencia sostenida del niño, pero sobre todo, con el compromiso de incorporar al infante a la comunidad humana, brindándole soporte emocional y educación.
A través de la parentalidad, el adulto también crece y se desarrolla. La presencia del hijo significa la apertura de oportunidades inéditas e insospechadas, que otras experiencias no pueden proporcionar. De este modo, la unidad bipolar "padres-hijo" genera un espacio donde todos los involucrados evolucionan y crecen como personas.
Ser padres no es fácil. Demanda la superación de muchos retos y de una energía especial. Los padres necesitan frecuentemente soporte externo para desempeñar su tarea. Más aún, en los tiempos actuales, donde la familia extensa es cada vez menos frecuente y ambos padres deben trabajar para asegurar el sustento familiar. Así, el apoyo externo de abuelos o tíos es un privilegio para algunos. Ocurre también que la composición familiar actual es variada, existiendo en muchos casos madres o padres solos, que cumplen su función individualmente.
Los niños tienen múltiples necesidades, y una de ellas es la adecuada parentalización. Los adultos pueden cumplir con éxito esta función si cuentan con un soporte para sí mismos y para el hecho de ser padres. Padres que no cuidan de sí mismos o que no cuentan con suficiente soporte, terminan exhaustos, deprimidos y su capacidad de parentalizar adecuadamente disminuye (Meighan, 1997). Este es uno de los factores que más afecta a los niños. Si realizamos un análisis cuidadoso veremos que los llamados "niños en riesgo" son, en su gran mayoría, pequeños que carecen de una adecuada parentalización. Diversos investigadores han observado que los niños "en riesgo" tienen menos oportunidad de iniciar interacciones con sus padres que niños que no están en riesgo (Hanson, 1984; Wedell-Monig & Lumley, 1980).
Diversos estudios nos muestran que, tanto en circunstancias de guerra, recesión económica, violencia social, vida en tugurios y otros males sociales, los niños se ven preservados del impacto negativo de éstos en la medida en que padres adecuados operan a modo de barreras protectoras de su bienestar (Freud, A., 1954; Silva, 1999; Baldwin, Baldwin & Cole, 1992).

¿En qué consiste una adecuada parentalización?
La parentalización se expresa a través del vínculo que se establece entre un padre, una madre y su hijo. Por lo tanto, la calidad de éste es el factor central a tomarse en cuenta. El "cómo" y el "cuánto" requieren los niños de sus padres hace alusión a las características cualitativas y cuantitativas de ese lazo que define la parentalidad.
El factor más importante en la calidad del vínculo entre padres e hijos es la empatía. Es gracias a esta capacidad - exclusivamente humana - que los padres de cualquier nivel socioeconómico y pertenecientes a cualquier cultura, pueden comprender profundamente las necesidades más sutiles de sus hijos, y responder a ellas con prontitud y pertinencia.
El "saber colocarse en el lugar del otro" permite a los padres el acceso a un modo de conocimiento a partir de la experiencia y del encuentro único, específico y variable con cada uno de sus hijos. La comprensión empática de las necesidades infantiles no tiene un nivel de conocimiento "científico" u "objetivo". Sin embargo, es de enorme relevancia para la crianza, en particular, y para las relaciones sociales en general.
La comprensión empática es así, un proceso y no un estado, en el cual se da un continuo esfuerzo de acomodación a lo nuevo y a la información desafiante sobre el niño, con la finalidad de acceder a su experiencia emocional, perspectiva particular y motivaciones subyacentes (Oppenheim, 1999). De este modo, consideramos el desarrollo de la capacidad empática como la base del edificio de la interrelación entre padres e hijos y, su presencia o ausencia, uno de los factores esenciales para el desarrollo de los niños.

¿Cómo y cuánto necesita un niño de sus padres?
El niño requiere de un vínculo con sus padres suficientemente bueno y suficientemente continuo en el tiempo para contar con estímulo y seguridad. Por lo tanto, un equilibrio entre calidad y cantidad son necesarios. Sin embargo, la cantidad de tiempo que un padre pase con su hijo no basta por sí misma. Un interesante estudio mostró que lo relevante al respecto es la percepción que el niño tiene de la disponibilidad emocional de sus padres. Esto es, no la cantidad específica de tiempo que pasa con ellos, ni tampoco las conductas concretas que los padres ejecutan para enriquecer la relación con sus hijos. Si bien esto es importante, no es lo central. De ello se deduce que lo que realmente importa es la disponibilidad de los padres para responder a las necesidades de sus hijos.
¿Cómo influye la cultura y el nivel socioeconómico en la crianza de los niños?
Cada cultura trasmite a sus miembros cómo ser padre o madre. En la crianza, los padres ponen en práctica lo que han vivido a partir de sus propias experiencias como hijos. Algunos puntos relevantes influenciados por la cultura son, entre otros:
- El nivel de participación del varón en la crianza de sus niños.
- Las características que se alientan y las que se buscan erradicar en ellos.
- Qué es bueno y malo, deseable o indeseable, feo o bonito. Es decir, los valores éticos y estéticos.
- En qué casos se permite la expresión de la agresión y la sexualidad.
- Tipo de contacto físico con los hijos, predominancia de lo verbal sobre lo no verbal y viceversa.
- Valoración del juego o la predominancia del aprendizaje para el trabajo.
- El estilo disciplinario ejercido con los hijos.
Todos estos aspectos y la cualidad que asumen de cultura a cultura guardan relación con la funcionalidad al mantenimiento del orden social y económico de la sociedad en los que tienen lugar. Así, el niño se ve condicionado por las expectativas de sus padres y por el estilo parental de los mismos. En pocas palabras, el niño se desarrolla a partir de una socialización específica a su cultura.

Características y habilidades de una buena parentalidad
Por lo general, los padres desean hacer las cosas lo mejor posible respecto a la crianza de sus hijos. Que lo logren es un reto, y diversas condiciones personales y del entorno influyen en una u otra dirección. Uno de los aspectos centrales es el acceso del padre o la madre al nivel evolutivo de adultos. Como dice Herzka (1995): "El ser adulto es una posibilidad, es una actitud frente a los seres humanos y al mundo. Adultez implica establecer lazos voluntariamente, asumir responsabilidades y compromisos por iniciativa propia y por propia elección, así como también la capacidad de ocuparse de sí mismo, y al mismo tiempo, estar disponible para percibir y ocuparse de otro". Por tanto, una adecuada parentalidad tendrá entonces como componentes centrales la responsabilidad y el compromiso, elegidos libremente como una opción de vida.
Hay otras características y habilidades que padres y madres requieren desarrollar para influenciar positivamente en la calidad del desarrollo de sus hijos pequeños:
- Buena salud mental que permita establecer un vínculo sano con el niño.
- Alegría, capacidad de sonreír, mostrar afecto y calidez.
- Observación, atención y capacidad reflexiva para actuar de acuerdo a las circunstancias, necesidades y requerimientos.
- Iniciativa.
- Capacidad de brindar cuidados pertinentes y oportunos: lo que el niño realmente requiere y a tiempo.
- Conocimientos, no amplios, pero suficientes, sobre lo que favorece el buen desarrollo de un niño.
- Creatividad para afrontar las situaciones inesperadas propias de todo curso de desarrollo humano.

La influencia de los padres en el desarrollo del niño pequeño
Los estudios modernos demuestran que durante los tres primeros años de vida se producen desarrollos neuronales de primer orden, como en ningún otro período del ciclo evolutivo. El niño nunca aprenderá tanto, ni se verá tan influenciado por su entorno. De este modo, es evidente que la importancia de los padres en el desarrollo de los niños pequeños es central.
Los padres son modelos y los ayudan a desarrollarse, al estimular en ellos diversos aprendizajes relacionados a la vida social, a la comprensión cognitiva de la realidad que los circunda, a valores morales y estéticos. A su vez, y esto es primordial, nutren al niño, tanto biológicamente, como con experiencias diversas que repercutirán en su crecimiento físico, en el desarrollo del lenguaje, en su capacidad de adaptación al mundo. Así, los padres, son los agentes promotores más importantes del desarrollo infantil.
Un niño es una persona distinta y separada de sus padres. Los hijos no "llegan a ser lo que son por sus padres", sino por ellos mismos. Algunos sienten erróneamente que sus hijos "les pertenecen" en virtud a lo que les han brindado desde que nacieron. Pero esto no es así. Los padres dan soporte, brindan oportunidades y aseguran la supervivencia del niño. Esa es su tarea y, deseablemente, una decisión asumida, donde padre y madre también reciben mucho del niño y de la experiencia de cuidarlo. La relación es recíproca desde el comienzo, aunque no siempre es percibido de esta manera.

Reflexiones
Los padres son las personas más importantes para los niños pequeños. Son aquellas personas que ofrecen al niño la oportunidad de desarrollarse con soporte y garantía de incondicionalidad. Padres e hijos se necesitan mutuamente de igual forma. Los niños necesitan de sus padres para sobrevivir e instalarse con seguridad en la vida; y los padres necesitan de sus hijos para seguir evolucionando como seres humanos.
El impacto que tiene el desarrollo de la buena interrelación entre padres e hijos es enorme.
Como señala Evans (1999): "De la calidad con la que los padres cumplan su función, dependerá no sólo el desarrollo de sus propios hijos, sino también el de la comunidad, como un todo. Después de todo, el mundo está compuesto por adultos y niños; por aquellos que se responsabilizan de introducir a la siguiente generación y por aquellos que deben ser cuidados: esa generación en crecimiento".

(1) En este artículo, todos los términos referidos a "parentalidad" y derivados, provienen de la utilización de la palabra inglesa "parenthood" y similares. No existe traducción literal en español, por lo que nos referiremos a ella como la calidad de ser padre o madre, con independencia de si es hombre o mujer quien asume esta función.
Giselle Silva es psicóloga clínica de profesión. Realizó un doctorado en psicopatología de niños y adolescentes en la Universidad de Zurich, Suiza.
Su tesis doctoral ¨Resiliencia en niños peruanos expuestos a vilolencia política¨ dio lugar a una publicación llamada ¨Resiliencia y violencia política¨. Actualmente es consultora de proyectos de desarrollo infantil con enfoque de resiliencia. Ha trabajado en diversos proyectos dirigidos a infancia y adolescencia, en zonas marginales del Perú. Es miembro fundador de Panez & Silva Consultores, que en la actualidad tiene a su cargo el Support Programme apoyado por la Bernard van Leer Foundation. Giselle Silva ha escrito varias publicaciones sobre desarrollo infantil, juego y otros temas vinculados a los niños. Se desempeña como docente universitaria y desde hace dos años es madre de una niña.

lunes, 7 de julio de 2014

Miren que bonita caja hecha con botella de gaseosa!

380188 224655747637405 1861513236 n Ideas para reciclar botellas de plástico
http://eco-ideasreciclaje.blogspot.com.ar/2014/04/como-hacer-facilmente-una-pala.html

domingo, 6 de julio de 2014

El Gusano y el Escarabajo

"Había una vez un gusano y un escarabajo que eran amigos, y pasaban charlando horas y horas.

El escarabajo estaba consciente de que su amigo era muy limitado en movilidad, tenía una visibilidad muy restringida y era muy tranquilo comparado con los de su especie.

El gusano estaba muy consciente de que su amigo venía de otro ambiente, comía cosas que le parecían desagradables y era muy acelerado para su estándar de vida, tenía una imagen grotesca y hablaba con mucha rapidez.

Un día, la compañera del escarabajo le cuestionó la amistad hacia el gusano:

- ¿Cómo era posible que caminara tanto para ir al encuentro del gusano?

A lo que él respondió que el gusano estaba limitado en sus movimientos.

Otros también le decían: - ¿Por qué seguía siendo amigo de un insecto que no le regresaba los saludos efusivos que el escarabajo hacía desde lejos?

Esto era entendido por él, ya que sabía de su limitada visión;  muchas veces ni siquiera sabía que alguien lo saludaba y cuando se daba cuenta, no distinguía si se trataba de él para contestar el saludo. Sin embargo, calló para no discutir.

Fueron muchas las respuestas que en el escarabajo buscaron para cuestionar la amistad con el gusano, que al final, éste decidió poner a prueba la amistad alejándose un tiempo para esperar a que el gusano lo buscara.

Pasó el tiempo y la noticia llegó: el gusano estaba muriendo, pues su organismo lo traicionaba por tanto esfuerzo: cada día emprendía el camino para llegar hasta su amigo y la noche lo obligaba a retornar hasta su lugar de origen.

El escarabajo decidió ir a verlo sin preguntar a su compañera qué opinaba.
En el camino, varios insectos le contaron las peripecias del gusano por saber qué le había pasado a su amigo. Le contaron de cómo se exponía día a día para ir a dónde él se encontraba, pasando cerca del nido de los pájaros. De cómo sobrevivió al ataque de las hormigas, y así sucesivamente de otros peligros. Llegó el escarabajo hasta el árbol en que yacía el gusano y al verlo acercarse, con las últimas fuerzas que la vida te da, le dijo cuánto le alegraba que se encontrara bien. Sonrió por última vez y se despidió de su amigo sabiendo que nada malo le había pasado.

El escarabajo avergonzado de sí mismo, por haber confiado su amistad en otros oídos que no eran los suyos, había perdido muchas horas de regocijo que las pláticas con su amigo le proporcionaban. Al final, entendió que el gusano, siendo tan diferente, tan limitado y tan distinto de lo que él era, fué verdaderamente su amigo, a quien respetaba y quería no tanto por la especie a la que pertenecía sino porque le ofreció su amistad.

El escarabajo aprendió varias lecciones ese día. La amistad está en ti y no en los demás; si la cultivas en tu propio ser, encontrarás el gozo del amigo.
También entendió que el tiempo no delimita las amistades, tampoco las razas o las limitaciones propias ni las ajenas.
Lo que más le impactó fue que el tiempo y la distancia no destruyen una amistad: son las dudas y nuestros temores los que más nos afectan. Y cuando pierdes un amigo una parte de ti se va con él. Las frases, los gestos, los temores, las alegrías e ilusiones compartidas en el capullo de la confianza se van con él”.

sábado, 5 de julio de 2014


Seguramente sabes lo que es un cristal de aumento, una lente circular que hace las cosas cien veces mayores de lo que son. Cuando se toma y se coloca delante de los ojos, y se contempla a su través una gota de agua de la balsa de allá fuera, se ven más de mil animales maravillosos que, de otro modo, pasan inadvertidos; y, sin embargo, están allí, no cabe duda. Se diría casi un plato lleno de cangrejos que saltan en revoltijo. Son muy voraces, se arrancan unos a otros brazos y patas, muslos y nalgas, y, no obstante, están alegres y satisfechos a su manera

Pues he aquí que vivía en otro tiempo un anciano a quien todos llamaban Crible-Crable, pues tal era su nombre. Quería siempre hacerse con lo mejor de todas las cosas, y si no se lo daban, se lo tomaba por arte de magia. Así, peligraba cuanto estaba a su alcance.
El viejo estaba sentado un día con un cristal de aumento ante los ojos, examinando una gota de agua que había extraído de un charco del foso. ¡Dios mío, que hormiguero! Un sinfín de animalitos yendo de un lado para otro, y venga saltar y brincar, venga zamarrearse y devorarse mutuamente.
-¡Qué asco! -exclamó el viejo Crible-Crable-. ¿No habrá modo de obligarlos a vivir en paz y quietud, y de hacer que cada uno se cuide de sus cosas?
Y piensa que te piensa, pero como no encontraba la solución, tuvo que acudir a la brujería.
-Hay que darles color, para poder verlos más bien -dijo, y les vertió encima una gota de un líquido parecido a vino tinto, pero que en realidad era sangre de hechicera de la mejor clase, de la de a seis peniques. Y todos los animalitos quedaron teñidos de rosa; parecía una ciudad llena de salvajes desnudos.
-¿Qué tienes ahí? -le preguntó otro viejo brujo que no tenía nombre, y esto era precisamente lo bueno de él.
-Si adivinas lo que es -respondió Crible-Crable-, te lo regalo; pero no es tan fácil acertarlo, si no se sabe.
El brujo innominado miró por la lupa y vio efectivamente una cosa comparable a una ciudad donde toda la gente corría desnuda. Era horrible, pero más horrible era aún ver cómo todos se empujaban y golpeaban, se pellizcaban y arañaban, mordían y desgreñaban. El que estaba arriba quería irse abajo, y viceversa.
-¡Fíjate, fíjate!, su pata es más larga que la mía. ¡Paf! ¡Fuera con ella! Ahí va uno que tiene un chichón detrás de la oreja, un chichoncito insignificante, pero le duele, y todavía le va a doler más.
Y se echaban sobre él, y lo agarraban, y acababan comiéndoselo por culpa del chichón. Otro permanecía quieto, pacífico como una doncellita; sólo pedía tranquilidad y paz. Pero la doncellita no pudo quedarse en su rincón: tuvo que salir, la agarraron y, en un momento, estuvo descuartizada y devorada.
-¡Es muy divertido! -dijo el brujo.
-Sí, pero ¿qué crees que es? -preguntó Crible-Crable-. ¿Eres capaz de adivinarlo?
-Toma, pues es muy fácil -respondió el otro-. Es Copenhague o cualquiera otra gran ciudad, todas son iguales. Es una gran ciudad, la que sea.
-¡Es agua del charco! -contestó Crible-Crable.
Fuente: http://www.ciudadseva.com/

jueves, 3 de julio de 2014

La Nuboselva 

Es una selva que se encuentra en el noroeste argentino sobre las laderas de las sierras y en medio de una espesa neblina y abarca las provincias de Salta, Jujuy, Tucumán, Catamarca y La Rioja.
Este ambiente se caracteriza por su tupida vegetación, por sus abundantes lluvias, principalmente entre octubre y abril, y por ser muy húmedo.
Este ecosistema cuenta con muchos animales entre los que se encuentran mamíferos como el mono caí, el yaguareté, el gato montés, la ardilla roja, el puercoespin, el tapir, el coatí y el murciélago.
Además hay aves como el carpintero dorado gris, el guacamayo, el picaflor, la lechuza, el águila poma y reptiles como la lagartija y la serpiente de cascabel.

mono caí - yaguareté - gato montés - ardilla roja
puercoespin - tapir - coatí - murciélago

carpintero dorado gris - guacamayo - picaflor - lechuza - águila poma

 
lagartija - serpiente de cascabel